El uso de la pornografía incrementa la probabilidad de sufrir violencia sexual en las mujeres, pero no en los hombres, según la información de uno de los estudios sobre pornografía, violencia sexual, agresión y victimización que se han presentado en la XL Reunión Científica de la Sociedad Española de Epidemiología (SEE), que este viernes, 2 de septiembre, finaliza en la localidad guipuzcoana de San Sebastián.
En España, la prevalencia de violencia sexual en personas adultas jóvenes es alta y afecta en mayor medida a las mujeres (49,9%) que a los hombres (25,9%). Además, el uso de la pornografía alguna vez en la vida entre las personas jóvenes es muy elevado, mayor en los hombres (95%) que en las mujeres (75%). El 59 por ciento de las mujeres que la consume o la consumió declara haber sufrido violencia sexual, frente al 28 por ciento de las mujeres que no la consume.
Estos son algunos de los datos que dejan las comunicaciones presentadas en la Reunión Científica de la SEE, que forman parte del proyecto 'Sexual violence perceptions and associated factors in young people. A mixed study', financiado por el Consorcio de Investigación Biomédica en Red de Epidemiología y Salud Pública (CIBERESP) y que codirigen Belén Sanz-Barbero y Carmen Vives-Cases.
Los resultados de este estudio, realizado en personas de 18 a 35 años, lleva a sus autoras a remarcar la necesidad de poner en marcha programas de educación afectivo-sexual entre los y las jóvenes y fomentar una actitud crítica hacia el uso de la pornografía dada su asociación con la violencia sexual y con el sexismo.
Orientación sexual
Las investigadoras recuerdan que estos programas deben tener en cuenta determinantes como la orientación sexual. Igualmente, apuntan que el abordaje de la violencia tiene que ser integral, tal y como recoge la Ley Orgánica 1/2004, de 28 de diciembre, de Medidas de Protección Integral contra la Violencia de Género.
Este trabajo recoge que, entre las mujeres, aquellas que consumen o consumieron pornografía tienen una mayor probabilidad de sufrir violencia que las que no consumen. Esta asociación es significativa a partir de los 22 años y aumenta con la edad. Mientras, en los hombres, no existe asociación entre el uso de pornografía y la probabilidad de sufrir violencia sexual. En ambos sexos, las personas con orientación homo/bisexual tienen más probabilidad de sufrir esta violencia que las heterosexuales.
Victimización de la violencia sexual
En el caso de la victimización en violencia sexual, en las mujeres existe una interacción entre el uso de pornografía alguna vez en la vida y la edad. El efecto de la edad sobre la probabilidad de ser agredida sexualmente es diferente según el consumo de pornografía. Concretamente, en las mujeres que no consumen, al aumentar la edad disminuye la probabilidad de sufrir violencia sexual. En el caso de las mujeres que la usan o la usaron, la probabilidad de sufrir violencia sexual no cambia con la edad.
Asimismo, destacan que las personas que usan pornografía tienen una probabilidad 2,4 veces mayor de haber agredido sexualmente a alguien que las personas que no la consumen. Es importante también resaltar que en los hombres existe una asociación positiva entre el consumo de pornografía y el sexismo hostil. Aquellos que consumen pornografía tienen unos valores medidos de sexismo hostil mayores que los que no consumen. En el caso de las mujeres, esta asociación (uso de pornografía-sexismo hostil) se mantiene solo en las mujeres homo/bisexuales