Lucas Minig
Así lo asegura la presidenta de la Asociación de Afectados por el Cáncer de Ovario y Ginecológico (ASACO), Charo Hierro. “Afortunadamente, estamos ante un tumor que se puede prevenir y diagnosticar en estadios tempranos, pero es esencial concienciar sobre la importancia de someterse a controles ginecológicos regulares, usar preservativos, limitar el número de parejas sexuales y administrar la vacuna tanto en hombres como en mujeres antes de iniciar sus relaciones sexuales, como se viene haciendo en otros países”, explica.
Según apunta Roche, basándose en datos del informe ‘Las cifras del cáncer en España 2019’, elaborado por la Sociedad Española de Oncología Médica (SEOM), en 2019 se detectarán cerca de 2.000 nuevos casos de cáncer de cérvix en España, un tumor que se encuentra entre los 10 más diagnosticados en el mundo, por delante de otros como el de tiroides, vejiga y algunos cánceres hematológicos.
En este sentido, el doctor Lucas Minig, quien ejerce como profesor de Ginecología de la Universidad CEU Cardenal Herrera de Valencia, señala que “el principal reto frente al cáncer de cérvix es erradicarlo y, para ello, las campañas de prevención son fundamentales". "Las mujeres de entre 30 y 65 años deben realizarse citologías del cuello del útero de forma periódica para diagnosticar lesiones premalignas del cérvix antes de que progresen a cáncer”, afirma.
Además, Lucas Minig destaca la importancia del uso del preservativo en todas las relaciones sexuales y durante todo el acto sexual, y añade que debe prestarse especial atención a la reducción del tabaco y de las situaciones de estrés crónico, que favorecen el estado de inmunodepresión.
Estas constituyen algunas de las principales pautas de prevención, según Roche, pero la doctora María Jesús Rubio, quien es miembro del Servicio de Oncología del Hospital Reina Sofía de Córdoba, recuerda que el mayor factor de riesgo para el desarrollo del cáncer de cérvix es la infección persistente por el virus del papiloma humano (VPH).
Abordaje y persistencia
Los especialistas, además, coinciden en la importancia del abordaje multidisciplinar de la enfermedad. “Entre los profesionales implicados en su diagnóstico y tratamiento es necesaria la figura del ginecólogo, los especialistas en Oncología Radioterápica y, en Oncología Médica, el patólogo y el médico nuclear. Todos ellos han de formar parte de un comité de tumores multidisciplinar que ayude a la toma de decisiones durante todo el proceso de la enfermedad de nuestras pacientes”, incide María Jesús Rubio.Rubio explica que, pesar de haber mejorado el tratamiento inicial de las pacientes, existen casos de persistencia o recurrencia de la enfermedad. “La tasa de recaídas se sitúa entre un 10y un 30 por ciento en estadios iniciales, y entre un 40 y un 60 por ciento en etapas avanzadas", detalla.
Por último, esta especialista destaca que el futuro para la mejora de la supervivencia y la calidad de vida de las pacientes con cáncer de cérvix en fases recurrentes, “probablemente, esté en la combinación de los antiangiogénicos con la inmunoterapia, ya que hoy existen múltiples ensayos clínicos que emplean nuevas dianas terapéuticas, así como vacunas que, probablemente, cambiarán el pronóstico y la supervivencia de estas mujeres”.