Cara Juan Gervas

Tribuna de opinión

Vacuna contra la varicela. Efectividad, coste y oportunidad.

Doctor en Medicina. Médico General jubilado. Equipo CESCA (Madrid, España). [email protected]; [email protected]; www.equipocesca.org; https://t.me/gervassalud

Guardar

Juan Gérvas (3) junio 2015
Juan Gérvas (3) junio 2015

Punto de vista

Nuestro colaborador Juan Gérvas, firmante de este escrito, advierte que las opiniones expresadas en el mismo son las del autor, aunque en mucho provienen de documentos de SESPAS y de su Grupo de Vacunas, así como de NoGracias y varios de sus editoriales.

Las vacunas sistémicas, aquellas recomendables en todas situaciones y poblaciones, (polio, difteria, sarampión, rubeola, parotidits, tétanos, tosferina) son un tesoro y logran a muy bajo coste resultados espectaculares (1) .

Sin embargo, estas mismas vacunas son manifiestamente mejorables, en el sentido de incrementar su efectividad. Por ejemplo, la vacuna contra el tétanos puede mejorarse en su aplicación, restringiendo la re-vacunación de adultos a una vez en la vida, a los 65 años (2). En otro ejemplo, son varias las vacunas sistémicas cuya inmunidad se desvanece con excesiva rapidez y no protegen de por vida: así, las vacunas contra la difteria (3), sarampión (4), parotiditis (5,6), y tosferina (7). Hay, pues, que mejorar las vacunas sistémicas.
Las vacunas son medicamentos y como tales producen beneficios y daños, de forma que su utilización debería buscar un balance en que los beneficios superaran en mucho a los daños.
A las vacunas sistémicas se les atribuye “inmunidad de grupo”, de forma que se supone que la vacunación protege a toda la población, incluyendo a los no vacunados. Esto es cierto para el sarampión, por ejemplo, y lo denominamos una “externalidad positiva” pues genera beneficios en ajenos.

Pero hay vacunas sistémicas que no producen inmunidad de grupo, pues protegen sólo a los que se vacunan; así, la vacuna contra el tétanos. Conviene saber que algunas vacunas tienen incluso “externalidad negativa”, en el sentido de que producen daños a los que no se vacunan. Por ejemplo, los vacunados contra la difteria pueden transportar bacterias de la difteria sin tener síntomas, y contagiar a los no vacunados (8).

En otro ejemplo de “externalidad negativa”, la vacuna contra la tosferina ha cambiado a la bacteria y llevado a mutaciones y (9) nuevas cepas que afectan a vacunados y no vacunados.

Sirva de otro ejemplo de “externalidad negativa” el que algunas vacunas sistémicas evitan la re-vacunación espontánea de toda la población al disminuir los gérmenes circulantes.
Las vacunas son medicamentos
Las vacunas, pues, son medicamentos y como tales producen beneficios y daños, de forma que su utilización debería buscar un balance en que los beneficios superaran en mucho a los daños. Además, las vacunas son intervenciones de salud pública frente a las enfermedades infecciosas, y por ello hay que encontrar un equilibrio entre beneficios clínicos individuales y beneficios sociales poblacionales (10). Esta cuestión es más importante, si cabe, con las vacunas no sistémicas, como la vacuna contra la varicela.

La vacuna contra la varicela está en el calendario vacunal público español (gratuito) y se recomienda la vacunación a los 12 años, en adolescentes que no hayan sufrido la enfermedad (y en pacientes de riesgo). El criterio de edad procede de la recomendación de la Comisión de Salud Pública del Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud.

Tal recomendación permite la existencia de casos de varicela infantil y un “reservorio” circulante de gérmenes que re-vacuna espontánea y mantenidamente a toda la población evitando los casos de varicela en los adultos, donde es mortal con mayor frecuencia (especialmente en las embarazadas) (11). Además, los niños que pasan la enfermedad quedan inmunes de por vida.
Cuando se ha introducido la vacuna contra la varicela en la infancia en España, el beneficio infantil no se ha acompañado del beneficio en la población y no se ha podido demostrar ni disminución de las hospitalizaciones, ni disminución de las muertes por varicela
Naturalmente, para la industria el negocio y el beneficio es menor si se vacuna una vez a los 12 años a los adolescentes que no hayan sufrido la enfermedad (y en pacientes de riesgo). Por ello su propuesta ha sido siempre la de vacunar en la primera infancia con al menos dos dosis, la primera entre los 12 y 15 meses y la segunda entre los 2 y 3 años (12). Esta propuesta carece de fundamento científico, como ha destacado la Sociedad Española de Salud Pública y Administración Sanitaria (13). Es una propuesta que provoca “externalidad negativa” (daños varios a quienes no se vacunan) en la población y, además, no sabemos si se desvanecerá la inmunidad obligando a revacunaciones posteriores.

Como era de esperar, cuando se ha introducido la vacuna contra la varicela en la infancia en España (por ejemplo, en Navarra), el beneficio infantil no se ha acompañado del beneficio en la población y no se ha podido demostrar ni disminución de las hospitalizaciones, ni disminución de las muertes por varicela (14).
La postura de los pediatras
Los pediatras españoles, representados por la Asociación Española de Pediatría y en línea con la Asociación Española de Vacunología y la Sociedad Española de Medicina Preventiva, Salud Pública e Higiene, han promovido y promueven la vacunación temprana, en contra de la decisión nacional, del Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud. Su fuerza es tal que de facto se ha impuesto el criterio de la industria fabricante de la vacuna (Sanofi) y en España se ha vacunado, a costa del bolsillo privado, casi el 90% de los niños pequeños, mientras en el Reino Unido era el 2% y en Francia el 7% (15) (Importa hacer notar que la vacuna en España tiene el precio más elevado de toda la Unión Europea, 71 euros por dosis).
El Ministerio de Sanidad tuvo que intervenir, en agosto de 2013, para que la vacuna contra la varicela no se dispensase en las farmacias y se emplease fuera de la recomendación técnica
Por ello el Ministerio de Sanidad tuvo que intervenir, en agosto de 2013, para que la vacuna contra la varicela no se dispensase en las farmacias y se emplease fuera de la recomendación técnica (16,17). Contra tal medida racional se manifestaron tanto las tres sociedades citadas como Sanofi (18), y entre todos instrumentaron a los medios de comunicación y a las familias. Sanofi llevó el caso a los tribunales y perdió. “En la vista del recurso que interpuso contra la Administración, Sanofi contó con el testimonio a su favor de dos miembros del Comité Asesor de Vacunas de la Asociación Española de Pediatría, pero el abogado del Estado no se dejó impresionar por sus argumentos y su contraataque resultó demoledor: “¿Ustedes formaron también parte del comité de su asociación que avaló científicamente que determinado somier evita la muerte súbita, recomendó las galletas Dinosaurio y los pañales Dodot?” (19).

Con motivo del caso de difteria en Olot (Cataluña), el partido político CiU llevó al Parlamento de España, en junio de 2015, una propuesta no de ley sobre “restricciones en la dispensación de vacunas”. Uno esperaría que los diputados se preocuparan por la mejora de la vacuna contra la difteria, de los cambios necesarios en su calendario, o de la falta de suero antidiftérico en España y en la Unión Europea, pero sus preocupaciones son como las de los pediatras, comerciales, de introducción de más vacunas de dudosa efectividad, y de su venta en las farmacias (20) . Por ejemplo, en dicha sesión se aprobó el pedir al Ministerio de Sanidad que se introdujera la vacuna contra la varicela a los 12 meses, y su venta en farmacia.
Lo que dice SESPAS
La Sociedad Española de Salud Pública y Administración Sanitaria (SESPAS) ha publicado una nota pidiendo que no se cambie el calendario vacunal y que se mantenga la vacuna contra la varicela a los 12 años, en adolescentes que no hayan pasado la enfermedad (21). Por increíble que parezca, la respuesta de los pediatras ha sido la de Sanofi, la de insistir en vacunar a los 12 meses (y segunda dosis a los 2-3 años) y acusar a SESPAS de que la incorporación de la vacuna “no debe de basarse en criterios de prioridades económicas” (22) . ¡Los pediatras de las galletas dinosaurios hablando de prioridades económicas!
Los criterios económicos son fundamentales en todas las políticas, más en tiempo de crisis, y más un sistema sanitario sometido a unos recortes indiscriminados que afectan incluso a la calidad y cantidad de servicios
Los criterios económicos son fundamentales en todas las políticas, más en tiempo de crisis, y más un sistema sanitario sometido a unos recortes indiscriminados que afectan incluso a la calidad y cantidad de servicios (cierres de camas hospitalarias, cierres de urgencias rurales, rebajas salariales, precariedad laboral. etc). Por ejemplo, es incluso fundamental considerar alternativas no médicas que produzcan más salud, como dar de comer a los niños españoles hambrientos (23).

En este caso, SESPAS ha empleado argumentos económicos de epidemiología y salud pública, pero conviene recordar que los costes para alguien son siempre los ingresos para otros (24). Los pediatras parecen despreciar los costes para la sociedad, quizá más atentos a los ingresos para su entorno.

--------------
NOTAS
[1]         http://equipocesca.org/resumen-del-seminario-sobre-eficacia-efectividad-y-seguridad-de-las-vacunas-aspectos-clinicos-profesionales-y-sociales/

[2]         http://www.msssi.gob.es/ciudadanos/proteccionSalud/vacunaciones/docs/TetanosDifteria_2009.pdf

[3]         http://www.elsevier.es/en-revista-medicina-clinica-2-resumen-immunity-to-diphtheria-among-adults-13079382

[4]         http://jid.oxfordjournals.org/content/early/2012/12/19/infdis.jis923

[5]         http://www.laopiniondemurcia.es/comunidad/2015/05/13/brote-paperas-recorre-europa-aparicion/646986.html

[6]         http://blogs.wsj.com/pharmalot/2015/06/08/merck-is-accused-of-stonewalling-over-effectiveness-of-mumps-vaccine/

[7]         http://www.nejm.org/doi/full/10.1056/NEJMoa1200850

[8]         http://ecdc.europa.eu/en/publications/Publications/diphtheria-spain-rapid-risk-assessment-june-2015.pdf

[9]         http://www.eurosurveillance.org/ViewArticle.aspx?ArticleId=20881

[10]         http://www.nogracias.eu/2015/06/05/editorial-nogracias-vacunas-no-todas-son-iguales/

[11]         http://equipocesca.org/la-vacuna-de-la-varicela-como-ejemplo-de-la-colusion-de-intereses-de-pediatras-y-de-industrias-con-los-intereses-de-la-poblacion-y-de-la-salud-publica/

[12]         http://vacunasaep.org/familias/calendario-de-vacunaciones-de-la-aep-2015-familias

[13]         http://www.sespas.es/adminweb/uploads/docs/NdP%20Varicela.pdf

[14]         http://evalmedicamento.weebly.com/formacioacuten/estudio-retrospectivo-sobre-bases-de-datos-poblacionales-para-comparar-las-hospitalizaciones-y-defunciones-por-varicela-y-herpes-zoster-1-en-el-periodo-2005-2013-entre-las-comunidades-autonomas-que-vacunan-de-varicela-a-los-15-18-meses-y-las-que-vac

[15]         https://www.diagonalperiodico.net/panorama/25577-poder-del-lobby-farmaceutico.html

[16]         http://www.gacetamedica.com/noticias-medicina/Recursos/binarios/generico.aspx?idart=771014&tipo=2&idcon=1638006

[17]         http://sociedad.elpais.com/sociedad/2013/09/03/actualidad/1378235805_374668.html

[18]         http://sociedad.elpais.com/sociedad/2014/04/14/actualidad/1397498406_283441.html

[19]         http://politica.elpais.com/politica/2014/11/07/actualidad/1415381372_000150.html

[20]         http://www.congreso.es/public_oficiales/L10/CONG/DS/PL/DSCD-10-PL-288.PDF

[21]         http://www.sespas.es/adminweb/uploads/docs/NdP%20Varicela.pdf

[22]         http://www.medicosypacientes.com/articulos/sepeap21715.html

[23]         http://www.nogracias.eu/2015/07/21/vacuna-de-la-varicela-no-gracias/

[24]         https://www.longwoods.com/content/23622