Daniel Bernabeu

Tribuna de opinión

Salir del armario

Presidente de AMYTS

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'Salir del armario', por Daniel Bernabéu
'Salir del armario', por Daniel Bernabéu

'Salir del armario' es una expresión coloquial referida a la persona que hace pública su homosexualidad, pero también, de una forma más genérica, es aplicable a todo aquel que oculta motivaciones, deseos o pulsiones, por miedo a ser estigmatizado o represaliado; y que se decide a hacerlas visibles y compartirlas con los demás.

Probablemente, ya intuirán por donde van las intenciones de este editorial, dedicado al entorno sanitario de Madrid, y en relación con las recientes movilizaciones de facultativos en el ámbito de la Atención Primaria y de la Atención Hospitalaria.

Las condiciones de temporalidad extrema que han cultivado con mimo los responsables sanitarios de la Comunidad de Madrid, apoyadas en la negativa a promulgar una Ley de selección y provisión de plazas que permitiese una regulación transparente y justa del acceso a los hospitales, ha ido creando un caldo de mansedad 'contenida', de 'indefensión aprendida', en los médicos y facultativos de nuestra Sanidad.

Han sido 20 años de continuas agresiones

Han sido 20 años de continuas agresiones, todas en dosis cuidadosamente calculadas para no provocar reacciones graves, pero con una toxicidad acumulativa importante. No es necesario que os recuerde todas esas 'pequeñas' agresiones que habéis ido acumulando, no todos las mismas, ni todas en la misma intensidad. Las tenéis muy frescas en la cabeza estos días.

Las movilizaciones de 2012, en contra de la privatización de seis hospitales públicos de Madrid, fueron el reflejo a una agresión 'de alta energía' desde la Consejería de Sanidad, dirigida, en aquel entonces, por Fernández-Lasquetty. La paralización del proceso por la Justicia y la posterior dimisión del hoy consejero de Hacienda de la Comunidad fueron una lección bien aprendida: las agresiones, o provocaciones, deben ser de 'baja intensidad' para evitar la aparición de respuestas anafilácticas de la movilización profesional. Y esta ha sido la doctrina seguida de forma escrupulosa desde la Consejería de Sanidad. Una doctrina que, como veremos, no contaba con la toxicidad acumulativa de estas agresiones de baja intensidad.

La pandemia Covid-19, en 2020, supuso un descomunal esfuerzo del sistema sanitario español para contener, cuidar y mantener con vida a miles y miles de ciudadanos, en muy poco tiempo, sin medios, y con escasa y errática colaboración institucional. Fue un espectacular ejercicio de coordinación y colaboración desde abajo, desde los centros, con los profesionales sanitarios en la primera línea de contención, dándolo todo. El precio pagado fue alto, en vidas y en estrés emocional y físico.

Pese al evidente impacto de la pandemia en las condiciones anímicas y de sobrecarga de los profesionales sanitarios, muy especialmente de los facultativos, las directrices de la Sanidad madrileña no se alteraron ni un milímetro; y la política de agresiones (léase también no concesiones) y de infrafinanciación del sistema sanitario público se mantuvieron. Su toxicidad se sumó a la ya acumulada y al importante desgaste pandémico.

Victorias judiciales

En 2022, toda una serie de victorias judiciales, promovidas por la Asociación de Médicos y Titulados Superiores de Madrid (AMYTS), nos hicieron ser conscientes de que las agresiones que recibíamos no solo eran agresiones injustas y arbitrarias sentidas por nosotros; es que, además, eran ilegales.

Anticuerpos contra la sobrecarga, la explotación, la temporalidad, la injusticia y el menosprecio se han ido formando lentamente en estos años en nuestro armario interior. Nuestra dignidad profesional, nuestro placer por ser médicos, pugnan ahora por salir de ese armario oscuro y lóbrego en el que se encuentran cruelmente encerrados. Solo necesitan que perdamos el miedo, el miedo a ser médicos, el miedo a ser nosotros mismos, el miedo a que me utilicen, el miedo a las represalias. El miedo a salir del armario de la 'indefensión aprendida'.

Y no dudes de que AMYTS estará siempre acompañándote. No sigas encerrado y en la oscuridad. Libérate de las cadenas, vuelve a disfrutar de ser médico, sal del armario.

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