“Estos datos, procedentes del Proyecto BEST en investigación clínica, confirman una tendencia positiva que explica cómo España ha logrado posicionarse en los últimos años como uno de los países europeos más atractivos a la hora de atraer inversiones en investigación clínica”, explicó Amelia Martín, quien es la responsable de la Plataforma de Medicamentos Innovadores de Farmaindustria, y que considera que mantener "un entorno positivo para la I+D biomédica en los próximos años es esencial para convertir al país en una potencia mundial en este ámbito".
Uno de los factores que están detrás de este incremento en los ensayos más complejos es la reducción de los tiempos de puesta en marcha de los proyectos, desde la presentación de la documentación hasta la incorporación del primer paciente, cuyo plazo medio se sitúa en 132 días, prácticamente dos meses menos que en 2004, cuando era de 191 días.
Sobre la reducción de plazos, la patronal de la industria farmacéutica señala que se intensificó, además, a raíz de la entrada en vigor, en 2016, del nuevo Real Decreto de Ensayos Clínicos, que mejoró las condiciones para la investigación y desarrollo de nuevos medicamentos.
Inversión en I+D biomédica
Así, Farmaindustria resalta que "la paulatina mejora de las condiciones de la I+D biomédica en España coincide con el esfuerzo creciente de las compañías farmacéuticas en investigación clínica, que invierten actualmente 662 millones de euros al año en este ámbito, más del doble de lo que se invertía en 2005, tras ponerse en marcha el proyecto BEST".Esta cantidad es más de la mitad del total de los fondos dedicados por la industria a I+D biomédica, que asciende a unos 1.150 millones de euros al año y sitúa a la industria farmacéutica como el sector líder en I+D industrial en España. Este compromiso con la I+D se está traduciendo, además, en un paulatino incremento del número de ensayos clínicos autorizados en España, que en ocho de cada 10 casos están promovidos por la industria farmacéutica.
Según los últimos datos de la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (AEMPS) presentados en la jornada, durante 2018, se autorizaron un total de 800 ensayos clínicos, 20 más que en el año anterior.
Por otro lado, los datos de un estudio basado en 50 ensayos clínicos del área de Oncología llevados a cabo en el Hospital Universitario La Paz muestran que cada ensayo clínico supone para el hospital un coste evitado medio de 31.298 euros, ya que toda la medicación administrada a los pacientes en el transcurso de la investigación corre a cargo de la compañía farmacéutica promotora. En el caso concreto del citado centro madrileño, el coste total evitado por acoger los 50 ensayos clínicos incluidos en el estudio ascendió a más de 1,4 millones de euros durante el año pasado.