
"Se trata de la primera comunidad que ha decidido dar el paso de vacunar contra meningococo B a escala nacional, y la tercera en hacerlo frente a los meningococos ACWY (después de Castilla y Léon y Melilla), tal y como recomienda el Comité Asesor de Vacunas de la AEP (CAV-AEP)", explica esta sociedad científica, que solicitó la entrada de ambas vacunaciones en la financiación pública, con base en la revisión de las evidencias científicas que avalan los beneficios para la prevención de la enfermedad meningocócica en la infancia.
Concretamente, en el documento de Recomendaciones de Vacunaciones 2019 que todos los años publica a principios de año, el CAV-AEP volvió a insistir en la recomendación sistemática de la vacuna de meningococo B para administrar a lactantes a partir de los tres meses de edad con una pauta 2+1. Para el resto de edades pediátricas, incluyendo la adolescencia, el Comité aboga también para su uso, realizando una recomendación de tipo individual.
Desde la AEP y su Comité Asesor de Vacunas se espera que otras regiones consideren dar este mismo paso en los próximos meses, aunque es "consciente de la dificultad de unificar los calendarios y comprende que las comunidades autónomas se vayan sumando a las recomendaciones de la AEP, según sus sensibilidades y disponibilidad de recursos".