9 TRAFICO IM.
9 TRAFICO IM.

El 5% de los accidentes de tráfico en España está relacionado con efectos de los medicamentos

Guardar



El 5% de los accidentes de tráfico en España está relacionado con efectos de los medicamentos, el 30% de los conductores está en tratamiento con algún medicamento, y un 25-30% de la población se automedica, lo que puede suponer un factor de riesgo añadido para la seguridad vial. Ante esta circunstancia, la Sociedad Española de Farmacia Comunitaria, SEFAC, ha participado junto con la Sociedad Española de Medicina de Tráfico, SEMT, y la Sociedad Española de Médicos de Atención Primaria, SEMERGEN, en la edición de un documento de consenso para facilitar a los profesionales sanitarios un mejor asesoramiento sobre los efectos de los medicamentos en la conducción de vehículos.

Para las entidades firmantes, mejorar la formación de los profesionales sanitarios y la información de los pacientes sobre los efectos de los tratamientos farmacológicos en la capacidad de conducción es el objetivo principal del citado documento de consenso. Si bien la relación medicamentos-conducción no es siempre negativa, puesto que los tratamientos pueden controlar las patologías y mejorar la aptitud ante la conducción, tanto los pacientes como los profesionales sanitarios deben ser conscientes -especialmente en épocas de grandes desplazamientos por carretera como es el verano- de que algunos fármacos tienen efectos que pueden alterar la capacidad para conducir vehículos.

Además, un 25% de los medicamentos autorizados en España puede interferir en la conducción -esta cifra llega al 74% en el caso de los cien fármacos más vendidos- y en la mayoría de los casos el paciente desconoce el riesgo potencial y no ha recibido información específica sobre el efecto del tratamiento en la capacidad de conducción. A esto hay que añadir que cerca del 30% de los conductores está en tratamiento con algún fármaco -de estos un 64% toma dos o más medicamentos de manera simultánea-, y entre un 25 y un 30% de la población se automedica, lo que puede suponer un factor de riesgo añadido para la seguridad vial.
Principales efectos de los medicamentos en la conducción
  • Somnolencia o efecto sedante (el 20% de los accidentes se producen porque las personas se duermen al volante).
  • Reducción de los reflejos y aumento del tiempo de reacción.
  • Alteración de la percepción de las distancias.
  • Hiperactividad.
  • Alteraciones oftalmológicas o de la audición.
  • Estados de confusión y aturdimiento.
  • Alteraciones musculares (espasmos, calambres…).
En cuanto al tipo de medicamentos que más implicación puede tener en la seguridad vial se encuentran las sustancias psicoactivas como las benzodiacepinas, los medicamentos hipnóticos y los opiáceos, y también otro tipo de medicamentos como los antihipertensivos, los antidepresivos y los antihistamínicos. Por patologías, tanto los procesos agudos (gripes, infecciones febriles…) como los crónicos (asma, arritmias, diabetes, etc.) pueden influir en la capacidad de conducir, por eso hay que evitar conducir en las fases agudas hasta que estén controlados los síntomas o estabilizada la enfermedad.
Recomendaciones para los profesionales sanitarios
  • Introducir en la historia clínica del paciente los hábitos de conducción.
  • Tener en cuenta a la hora de prescribir aquellos que afecten a la capacidad de conducir e informar al paciente para prevenir un accidente.
  • Aconsejar la vía de administración con menores efectos sistémicos.
  • Pautas de dosificación: formas de liberación retardada.
Recomendaciones para pacientes de edad avanzada
  • Conducir principalmente por calles conocidas.
  • Limitar los viajes a lugares de fácil acceso y cercanos al hogar.
  • Evitar riesgos: rampas de carreteras, giros a la izquierda, cruces con especial dificultad de coordinación…
  • No conducir por la noche o con un clima desfavorable.
  • Si los miembros de la familia consideran que el familiar anciano no puede conducir de manera segura, deben contactar con su médico.
  • El médico debe llevar a cabo los exámenes correspondientes y recomendar lo necesario en relación a la habilidad del individuo para seguir conduciendo.
  • Del mismo modo, es importante que en relación a los medicamentos se evite la polimedicación innecesaria y fomentar la adherencia a los tratamientos disminuyendo las pautas posológicas, etc.