
"La encuesta 'RA Matters' intenta aclarar cómo es el día a día de una persona con artritis reumatoide y muestra que nuestra falta de comprensión y cómo repercute en la gente con artritis reumatoide sigue siendo la principal barrera en el intento por mejorar la calidad de vida estas personas", afirmó el director sénior de Lilly, Roberto Servi. "Era muy importante conocer de verdad qué piensan todas las personas con artritis reumatoide", aseguró.
Las tareas cotidianas, una de las principales preocupaciones
De acuerdo con los datos recogidos, más de la mitad de las personas con artritis reumatoide considera que no tienen suficiente flexibilidad en su trabajo y que hasta un 43 por ciento y un 39 por ciento se sienten limitados en sus puestos de trabajo por la fatiga y el dolor, respectivamente. Además, recuerdan desde el laboratorio, el pico de incidencia de la artritis reumatoide se produce precisamente entre los 45 y los 55 años, "en plena edad laboral".La encuesta, asimismo, profundizó en los aspectos personales de las vidas de los pacientes, donde las actividades cotidianas resultaron ser "uno de los que más preocupa a las personas con artritis reumatoide, ya que cuatro de cada cinco sitúan como uno de sus principales retos el poder completar tareas diarias sin dificultad". Además, señala que al 60 por ciento de las personas afectadas le resulta "muy complicado" realizar ejercicio físico, y que una de cada cuatro afirma tener problemas con las rutinas de aseo personal.
Por otra parte, el 65 por ciento de los encuestados afirmó sentir frustración, así como sentimientos asociados de estrés y ansiedad, "debido precisamente a esta incapacidad de realizar actividades que la población general lleva a cabo sin ninguna dificultad", según explican desde la compañía farmacéutica. El 40 por ciento, además, tiene problemas con su pareja debido a la enfermedad, subraya Lilly.
"La vida con artritis reumatoide no debería comprometernos en absoluto; una persona con artritis reumatoide debería poder controlar esta enfermedad debilitante y no, como ocurre actualmente, ver su vida definida por la enfermedad", reivindicó Roberto Servi. "Se debe trabajar más para que lo que de verdad les importa a las personas con artritis reumatoide se tenga en consideración en las decisiones de manejo clínico y tratamiento", concluyó.