Hospitales Católicos de Madrid incide en la formación para alinear a su plantilla en valores

Según muestra su primera encuesta sobre este aspecto

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Hospitales Católicos de Madrid han comunicado que en su primera encuesta sobre valores destaca su apuesta por la formación como herramienta para trasladar a sus cerca de 2.000 empleados los valores que identifican su propuesta de servicio en el campo de la Sanidad.

José Cordero

La primera encuesta sobre valores en los servicios hospitalarios de la Iglesia, en la que participaron gerentes y responsables de las congregaciones religiosas al frente de estas instituciones, identificaron como rasgos particulares de la cultura de sus centros sanitarios: la hospitalidad y la humanidad, como modo de acogida, asistencia y cuidado; la profesionalidad y el compromiso con la mejora continua; el favorecimiento de una relación de confianza con el paciente y el trabajo en equipo.

Para los participantes en esta encuesta, la forma de incorporar estos valores entre el personal de sus plantillas se realiza mediante la formación permanente tanto en valores como en cultura hospitalaria, lo que se plasma tanto en manuales de acogida y cursos periódicos que se realizan en horario de trabajo. Además, en todos los centros está implantada la cultura de la calidad, que se materializa en la realización periódica de evaluaciones del desempeño y encuestas de satisfacción entre los pacientes.
Centralidad en el paciente
Según se refleja en los resultados de este cuestionario, los atributos que deben formar parte de los profesionales de la Medicina que ejercen su labor en los centros sanitarios católicos, al margen de sus conocimientos científicos y técnicos, son la humanidad en la atención; centralidad del paciente; acogida liberadora; atención como encuentro personal; respeto a la persona, a su dignidad, cultura, valores y creencias, y una actitud de escucha permanente.

“La hospitalidad que nos define como instituciones sanitarias nos conduce a salir de nuestro propio interés y caminar hacia el encuentro con el otro. Todo ello nos lleva a responder a las necesidades del paciente, ofreciéndole siempre un servicio eminentemente humano, tanto en la vertiente terapéutica como espiritual”, apunta el gerente de Hospitales Católicos de Madrid, José Cordero.