
Según este sindicato, las complicaciones "más evidentes" en el servicio del Hospital General Universitario Gregorio Marañón se registran en las áreas de observación y en las tres unidades de ingreso prehospitalarios (UPH) existentes, las cuales "están por encima de su capacidad y con un claro déficit de recursos humanos y de medios naturales". Señala, además, que una de las salas de ingreso solo tiene tomas de oxígeno y carece de carros de medicamentos y de cuñeros, así que las auxiliares "tienen que salir por el pasillo con todos los excrementos de la sala en la que se encuentre este dispositivo".
Desde la delegación madrileña de CSIF entienden que "las contrataciones de tres días apenas ayudan a rebajar la sobreocupación de las Urgencias en este centro, mientras que, otros hechos, como el cese de la directora de Enfermería, de probada competencia, únicamente redundan en una mala atención al paciente". Por último, consideran importante "no permitir el acceso a familiares en casos de sobreaforo y agilizar las altas en camas a cargo de Medicina Interna, para que no haya enfermos esperando hasta 72 horas para ingresar".