Sobre este nuevo proyecto asistencial, que cuenta con la colaboración científica de las Universidades de Salamanca y la de San Jorge de Zaragoza y el apoyo de Laboratorios Cinfa, el citado Consejo señala que "pretende mejorar la seguridad de los pacientes en torno a su medicación y conciliar sus tratamientos cuando reciben el alta hospitalaria tras un ingreso".
En la fase actual del estudio, los Colegios Oficiales de Farmacéuticos de Castellón, Guadalajara, Huelva, Las Palmas, León, Pontevedra, Santa Cruz de Tenerife y Valencia están ofreciendo la participación en el programa a las farmacias, hospitales y centros de Atención Primaria. Asimismo, se desarrolló la jornada de formación de los Formadores Colegiales, que tienen la misión de coordinar y facilitar la labor de los farmacéuticos participantes en cada una de las provincias.
Evaluación del impacto
El programa comenzará en mayo y el trabajo de campo tendrá una duración de entre ocho y 12 meses. Una vez finalizado, se evaluará el impacto de este servicio en términos clínicos, económicos y humanísticos, para valorar su futura implantación. La Organización Mundial de la Salud (OMS) muestra que, en la Unión Europea (UE), aproximadamente un 10 por ciento de los pacientes presentan efectos adversos a los medicamentos como consecuencia de la hospitalización, lo que produce una muerte por cada 100.000 habitantes, alrededor de 5.000 muertes al año.En España, el Estudio Nacional de Efectos Adversos relacionados con la hospitalización indicó ya en 2005 que la incidencia de efectos adversos relacionados con la asistencia sanitaria es del 9,3 por ciento, y según el Institute for Safe Medication Practices, el 50 por ciento de todos los errores de medicación ocurren en las transiciones asistenciales.