Durante la celebración en Sevilla del 22º Congreso Nacional Farmacéutico, el Consejo General de Colegios Oficiales de Farmacéuticos (CGCOF) ha presentado el Decálogo para la Divulgación Farmacéutica en Redes Sociales, que elaboró en colaboración con más de 150 profesionales activos en las mismas.

En este acto, el presidente de la citada corporación sanitaria, Jesús Aguilar, señaló que las redes sociales forman ya parte de la vida cotidiana y son un medio esencial para que los profesionales lleguen a más personas, facilitando la comunicación entre el farmacéutico y los pacientes. Pero, también, señaló que son un medio para distribuir bulos que pueden perjudicar a los ciudadanos. Por ello, su buen o mal uso puede tener consecuencias.

Gema Herrerías, quien es farmacéutica y una persona activa en redes sociales, presentó este Decálogo, que contribuye a posicionar a la profesión farmacéutica como referente en la difusión digital de contenido sanitario. El mejor influencer en redes sobre medicamento es y debe ser el farmacéutico.
La divulgación farmacéutica en redes sociales es…
Profesional. El farmacéutico activo en redes sociales, además de actuar a título individual, está proyectando una imagen del conjunto de la profesión farmacéutica. Una actuación profesional que tiene como límites la legislación sanitaria vigente y el código deontológico de la profesión; y, como objetivo, la mejora de la salud y calidad de vida del paciente.
Veraz. La divulgación farmacéutica está basada en la evidencia científica actualizada. Existen más de 26.000 medicamentos de uso humano comercializados en España, 46.000 productos de salud y más de 40.000 posibles interacciones que requieren de una formación continua para ofrecer al ciudadano una información rigurosa, precisa, eficiente y de calidad en cualquier canal.
Responsable. Los contenidos de calidad en torno a los medicamentos y productos sanitarios fomentan su uso adecuado y responsable, sin crear alarmismo social ni generar confusión o dudas respecto del adecuado cuidado de la salud. La colaboración de los farmacéuticos en la difusión de campañas y de contenidos rigurosos genera cultura sanitaria en los ciudadanos y contribuyen a mejorar la Salud Pública.
Cercana. La divulgación farmacéutica, al igual que la accesibilidad de la red de Farmacias, está disponible online las 24 horas del día, los 365 días del año. No se actúa desde el anonimato, se procura que los contenidos sean sencillos de entender por el ciudadano, se complementa la atención personalizada y se refleja el día a día de la farmacia y los farmacéuticos.
Versátil. La elaboración de piezas divulgativas se adapta al formato, al tono y al estilo de cada plataforma social para lograr una mayor efectividad y alcance del mensaje. Las redes sociales consideradas por los farmacéuticos como más útiles para divulgar son: Instagram (88%), TikTok (47%), Youtube (46%) y Facebook (43%).
Objetiva. El farmacéutico proporciona información sanitaria objetiva y sin intereses más allá de la salud de los pacientes. Internet ha facilitado la publicidad encubierta y, en materia de medicamentos que necesitan receta, está prohibido hacer publicidad a la población general. Distinguir información de contenido promocionado es fundamental para garantizar la salud de los ciudadanos.
Amena. Los contenidos sanitarios se elaboran de forma comprensible, atractiva, sin excesivos tecnicismos y sin perder el rigor científico. Empleando recursos gráficos y visuales que refuerzan el alcance y la comprensión del mensaje principal. El entretenimiento y el humor, bien empleados, son, también, herramientas útiles.
Pedagógica. La difusión de contenidos farmacéuticos impactan de forma positiva en la educación para la salud de los ciudadanos. Las argumentaciones profesionales rebaten los bulos sanitarios sin fundamento que circulan por las redes, y contribuyen a la lucha contra la desinformación, los mitos, la infoxicación y las fake news.
Respetuosa. La actitud del farmacéutico en redes sociales se basa en la educación, la moderación y el respeto tanto hacia los propios compañeros de profesión como al resto de colegas sanitarios. Frente al ciberodio existente, la respuesta es no dar protagonismo alguno a los acosadores (trolls, haters…) y reportar los perfiles, actividades ilícitas y contenidos nocivos para la salud.
Colaborativa. La creación de comunidad es inherente a las redes sociales. Una participación de los farmacéuticos que aportan contenidos de valor y utilidad a la comunidad desde un enfoque multidisciplinar y siempre bajo el prisma de situar al paciente en el centro del sistema.